tras un profundo amor, en lo mas temido de mi corazón, una luz me ilumino, quizás las fronteras del bien y el mal estallo, creando el pánico y dolor.
con un esfuerzo intento olvidar ese mal que tanto me daño, ese amor que no fue hecho para mi, en la mirada eterna de la oscuridad un dulce viento me abrazo.
el deseo de amar se hizo mayor pero sin poder acercarme a quien a los dioses les rogué, un aliento de mi salio casi sin voz susurro, vuelve junto a mi por favor, pero el no lo holló.
en un rincón mi alma lloraba y lloraba esperando ser amada, pero despertó y se dio cuenta que su corazón no lo podía regalar ya que el ultimo no se lo devolvió.
caminando melancólico por la ciudad el cielo lo consoló, con su triste llanto que sobre su cuerpo callo, la nostalgia de a ver amado y a ver continuar amándolo se apodero del intentando abrir un camino ficticio en un mundo llamado sueños donde el lo pudiera tener.
pero siempre era igual, el mismo despertar, el ver que no es la realidad y otra vez mil gotas soltar.
entonces intento descubrir quien era, y que podía hacer, seco sus lagrimas y se dirigió a soñar, soñar despierto imaginando que tenia alas y podía volar saliendo por su ventana y recorriendo la ciudad, asta llegar a un hermoso paisaje de dos lunas contrarias, arboles rojos tierra negra y un rió rosa, donde puntos de luz flotaban sin mas, un lugar que en el alma escondió.
rocas flotantes como amantes hubiera tenido, dos charcos de sangre por amores sufridos, entonces se puso a buscar a comprender un sentido a su vida, pero tan solo descubrió que un dulce lugar estaba construyendo y que tras la muerte allí descansaría en paz.
intentando buscar su salvación el origen del bien, un dulce beso de despedida en un atardecer mágico, pidiendo bendición al nirvana para que su ser por fin deje de ser un ser y flote feliz por toda la eternidad dando el brillo a esas estrellas que una noche las mire junto a el.
No hay comentarios:
Publicar un comentario